Consejos populares: el pueblo en el camino de poder y autogestión

Democracia representativa que antes era sinónimo de libertad y la expresión de la voluntad popular, hasta una parte de pequeña burguesía y ciudadanía liberal lo ve ahora como una arma de oligarquía. Durante mas de un siglo nos intentaban mostrar que no existe la alternativa a la democracia en la forma del parlamentarismo burgués. Es un mito con raíces en la sociedad moderna tan fuertes que incluso la mayor parte de la izquierda le da su apoyo haciendose parte del sistema opresor y fortaleciendolo.

Mientras pequeña burguesía occidental intenta encontrar una salida de esta decepción intentando complementar el parlamentarismo con la llamada “democracia directa” del tipo suizo, los pobres en los estados neocoloniales se dieron cuenta hace mucho que la única manera de sobrevivir es por la vía de la autogestión. No hace falta buscar ejemplos en el pasado lejano en los países socialistas que ya no existen. Es suficiente echar un ojo a lo que tenemos en el presente y darnos cuenta que Turquía ofrece un ejemplo de la democracia directa experimentada y probada en la practica.

Origen de los Consejos Populares

Que son los Consejos Populares? Sería un eufemismo definirlos como órganos de la democracia directa. Los Consejos Populares son una expresión del poder popular en los que el pueblo no solo toma decisiones sino también tiene el poder (y por tanto la responsabilidad) de realizar lo decidido. Para comprender el rol y propósito de los Consejos, para comprender como encajan en la idea del poder popular y autogestión, es necesario conocer su origen.

Los Consejos Populares nacieron en los años ’70 en Turquía durante la ola del terror fascista y del estado, cuando la inmigración interna trajo las masas de los campesinos pobres a los alrededores de Estambul donde formaron barrios bajos. La necesidad para defenderse de la violencia física y para resolver los problemas existenciales (construcción, agua potable, luz, etc.) requería unidad y solidaridad del pueblo. Esta tarea la llevo a cabo la Izquierda Revolucionaria (Devrimci Sol), una organización marxista-leninista que estableció Consejos Populares, Comités Populares y Comités de lucha antifascista. Mientras los Comités de lucha antifascista servía para autodefensa del terror de estado y del fascismo civil, los Comités Populares cumplían con las tareas individuales que les asignaba el Consejo Popular. Por ejemplo, los comités se formaban para la construcción de casas, provisión de los materiales y entrega de los pisos.

El propósito practico de los Consejos es claro–solución de los problema inmediatos y las dificultades existenciales. Sin embargo, el propósito político no se queda tan obvio. Desde el punto de vista político, el objetivo ha sido unir la lucha económica con la lucha contra la represión para involucrar el pueblo en la solución de los problemas que les afectan directamente; para que participen tanto en la toma de decisiones como en la toma de la responsabilidad de su propio destino. En lugar de convertir el pueblo en un espectador pasivo que espera que los revolucionarios y los activistas políticos resuelvan sus problemas, los Consejos Populares movilizan el pueblo para que participen de manera activa en la formación de una sociedad basada en autogestión.

Aunque las actividades de los Consejos Populares pararon después del golpe de estado el 12 de septiembre 1980., resumieron la lucha de nuevo en los años ’90. Nuevos Consejos aparecieron primero en el barrio de Estambul llamado Gazi, expandiendose por las zonas en las que surgía la necesidad de organización y resistencia popular. Principios en los que se basaron son:

solidaridad entre los pueblos independiente de la nacionalidad y religión;

unidad en la defensa de agresión;

solución de los problemas infraestructurales causados por la desigual distribución de la riqueza (educación, seguridad social, sanidad, alojamiento, alimentación);

lucha contra los problemas de la decadencia social y cultural: crimen, toxicomanía, juegos de apostar, alcoholismo;

solución de los problemas de mujeres (amas de casa, empleadas, madres y esposas como objetos sexuales);

solidaridad en producción y consumo a través de las cooperativas que no tienen beneficio como objetivo, sino generar empleo;

incentivar actividades deportivas para promover la vida sana con hombres, mujeres y niños como participantes activos;

mejora del sistema educativo a través de la construcción de nuevas escuelas, mejora de la calidad y cantidad de los medios de educación y bajada de los gastos de escolarización;

mejora de la salud,y

solución de los conflictos internos fuera del sistema judicial del estado.

Consejos Populares en practica

En sus primeros años, el Consejo de Gazi ha cosechado éxitos no solo dentro de los problemas existentes sino también en la movilización de la población local. El Consejo Popular de Gazi ha ganado la confianza del pueblo con su trabajo eficaz. El problema de luz, que dificultaba la vida cotidiana de los ciudadanos y los propietarios de los negocios pequeños, ha sido solucionado.

El Comité de Deportes formó un club deportivo local y ha conseguido no solo quitar los niños de la calle, sino han conseguido también cambiar la situación en la cual deporte fue sinónimo de “futbol”–los ciudadanos ahora tienen oportunidad de dedicarse a otros tipos de deporte como atletismo, tenis de mesa, voleibol, etc. Por primera vez se ha hecho posible a mujeres practicar deportes de manera adecuada.

El paso clave en ganar la confianza ha sido la mejora de la salud. Gazi es un barrio muy pobre cuyos ciudadanos no tienen recursos para una sanidad adecuada. Por esa razón, el Consejo Popular inició la acción de recogida de medicamentos y a la vez organizó consultas para los ciudadanos de Gazi.

Cabe destacar el Comité de Mujeres. Mujeres tienen problemas de educación, salud y empleo muy específicos. El Comité ha conseguido establecer consultas medicas regulares, alfabetización de mujeres y estableció un centro para las mujeres sin trabajo, a través del cual pueden vender sus productos caseros.

Nuevos Consejos nacen de la lucha

En el barrio Sarigazi (Estambul), el Consejo Popular nació de la lucha contra la destrucción de las casas de los vecinos. El estado quería demoler la zona con el pretexto del peligro por salud que tiene el río cercano. El Consejo formó un comité de defensa que luego puso barricadas en el barrio y movilizó los vecinos. Las fuerzas de estado no pudieron intervenir y el barrio se salvo de la demolición. El estado a menudo busca excusas para gentrificar los barrios pobres–destruir las casas de los pobres para construir casas de lujo.

Pergamon cerca de Izmir ha vivido una experiencia similar. Una corporación multinacional de explotación de oro contaminó la tierra con cianuro de potasio. La contaminación destrozó el medio ambiente y el único fuente de la subsistencia de la gente en la zona: agricultura. El Consejo Popular se formó en la zona con el objetivo de ofrecer resistencia a Eurogold.

Barrio Okmeydani es otro ejemplo del éxito. El Consejo Popular desarrolló la lucha contra el crimen, toxicomanía, juegos de apostar y prostitución. Esta lucha sigue desarrollandose 20 años sin interrupción .

Donde están los Consejos hoy

Los Consejos Populares tienen un lugar destacado entra las actividades del Frente Popular–la organización que tiene como objetivo llevar a cabo la lucha por el socialismo por la vía extraparlamentaria, la lucha contra el imperialismo y la oligarquía, ademas de traer esta lucha a todos los aspectos de la vida cotidiana. Los Consejos Populares se han convertido en la herramienta de la lucha contra la pobreza, decadencia y gentrificación. Son la verdadera alternativa al parlamentarismo.